Quiero ser una chica Almodovar
Quiero ser una chica Almodóvar, como Carmen Maura o Victoria Abril, mejor Penélope…aunque si puedo decir que soy una Penélope posmoderna.
Quiero esperar a algún Benigni en bicicleta que me diga “boggiorno principesca”, pero me aburre, me inquieta, me hastía, me cansa. Ya a nadie le interesa esperar, ni a mí. Es mejor moverse, caminar, correr viajar hacia nuevos horizontes. Emprender el camino entre margaritas, malvones y campos de amapolas en los valles que se abren entre las montañas.
Quiero volver a creer, como cuando era más chica y creía que había un camino a Katmandú, pero trágicamente deje de creer en que los ’60 eran posibles para siempre. El mayo francés, el Sgt Pepper’s Lonely Hearts Club Band, el verano del amor, todo se terminó. Después de todo los Beatles se separaron, el Che va la facu en una remera, y el Muro de Berlín se callo por su propio peso. But, I just believe in my and that's reality.
Quiero dejarme crecer mi pelo lo más largo posible, treparme a unos enormes tacos desde donde mirar el mundo, y me pintarme las uñas del mas furioso rojo, usar un vestido azul y unos aros enormes. Ser una bailarina entre los charcos después del la lluvia, girar sobre mi y estar en un sobre un escenario cantando Where Is My Mind?
Quiero ser Putita, Rubí o psicodélica dorada, Soy Rock. “Quiero ser como Catherine Deneuve, con mi traje rosa de Chanel, voy a subir a la torre Eiffel, quizás te mire desde allí.” Y además quiero ser un cuadro de Gustav Klimt. También, ser stardust.
Quiero ser tantas cosas, y muchas más. Quiero ser como soy y distinta. Buscarme y encontrarme, redescubrirme, juzgarme, cambiar de opinión. Estar sola, pero no quedarme sola. Quiero ser una tormenta con vientos huracanados y también una canción, ser una buena foto.
Quiero parir, llorar y amar, quizás algún día. Morir y no temer.
Quiero ser auténtica. Y eso así…porque como dice una de esas chicas de Almodóvar, “Una es más auténtica, cuando más se parece a lo que ha soñado de si misma.”
Quiero esperar a algún Benigni en bicicleta que me diga “boggiorno principesca”, pero me aburre, me inquieta, me hastía, me cansa. Ya a nadie le interesa esperar, ni a mí. Es mejor moverse, caminar, correr viajar hacia nuevos horizontes. Emprender el camino entre margaritas, malvones y campos de amapolas en los valles que se abren entre las montañas.
Quiero volver a creer, como cuando era más chica y creía que había un camino a Katmandú, pero trágicamente deje de creer en que los ’60 eran posibles para siempre. El mayo francés, el Sgt Pepper’s Lonely Hearts Club Band, el verano del amor, todo se terminó. Después de todo los Beatles se separaron, el Che va la facu en una remera, y el Muro de Berlín se callo por su propio peso. But, I just believe in my and that's reality.
Quiero dejarme crecer mi pelo lo más largo posible, treparme a unos enormes tacos desde donde mirar el mundo, y me pintarme las uñas del mas furioso rojo, usar un vestido azul y unos aros enormes. Ser una bailarina entre los charcos después del la lluvia, girar sobre mi y estar en un sobre un escenario cantando Where Is My Mind?
Quiero ser Putita, Rubí o psicodélica dorada, Soy Rock. “Quiero ser como Catherine Deneuve, con mi traje rosa de Chanel, voy a subir a la torre Eiffel, quizás te mire desde allí.” Y además quiero ser un cuadro de Gustav Klimt. También, ser stardust.
Quiero ser tantas cosas, y muchas más. Quiero ser como soy y distinta. Buscarme y encontrarme, redescubrirme, juzgarme, cambiar de opinión. Estar sola, pero no quedarme sola. Quiero ser una tormenta con vientos huracanados y también una canción, ser una buena foto.
Quiero parir, llorar y amar, quizás algún día. Morir y no temer.
Quiero ser auténtica. Y eso así…porque como dice una de esas chicas de Almodóvar, “Una es más auténtica, cuando más se parece a lo que ha soñado de si misma.”
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