Le Petit Prince

Confieso que he leido, y gastado las paginas este libro, y siempre en el encuentro cosas nuevas, encuentro parecidos. Es un libro cursi, hasta yo lo creo, y también se ha convertido en un cliché. Pero es así El Principito me dejo esto:

“He vivido así, sólo, sin nadie con quien poder hablar verdaderamente hasta que hace 6 años tuve un panne en el desierto del Sahara.”

“Le premier noir je me suis donc endormi sur la sable à mille milles de toute terre habitée. J’étais bien plus isolé qu’un naufragé sur radeau au milieu de l’océan. Alors vous imaginez ma surprise, au lever du jour, quand une drôle de petit voix m’a réveille. Elle disait -¡Por favor…Píntame un cordero!”

“A las personas mayores les gustan las cifras. Cuando les hablas de un nuevo amigo, jamás preguntan sobre lo esencial del mismo. Nunca se les ocurre preguntar: ‘¿Qué juegos prefiere? ¿Le gusta coleccionar mariposas?’. Pero en cambio ellos preguntan: ‘¿Qué edad tiene? ¿Cuantos hermanos?’…

“Cada día yo aprendía algo nuevo sobre el planeta, sobre la partida y sobre el viaje. Esto venia suavemente al azar de las reflexiones.”

¡Ah, principito, cómo he comprendido lentamente tu vida melancólica! Durante mucho tiempo tu distracción fue la suavidad de las puestas de sol.”

Y el niño rubio dijo: “-Si alguien ama a una flor de la que sólo existe un ejemplar en millones y millones de estrellas, basta que las mire para ser dichoso. Puede decir satisfecho ‘Mi flor esta allí, en alguna parte…’”

“¡Ah, era muy coqueta aquella flor! (…) Hasta que una mañana, precisamente al salir el sol se mostró esplendida. (…) El principito no pudo contener su admiración: ¡Que hermosa eres! (…) Y así, ella lo había atormentado con su vanidad un poco sombría”

“¡No supe comprender nada entonces! Debí juzgarla por sus actos y no por sus palabras. ¡La flor perfumaba e iluminaba mi vida y jamás debí huir de allí! ¡No supe adivinar la ternura que ocultan sus pobres astucias! ¡Son tan contradictorias las flores! Pero yo era demasiado joven para amarla.”

“Y se sintió muy desgraciado. Su flor le había dicho que era la única de su especie en todo el universo. ¡Y ahora tenia ante sus ojos más de cincuenta mil, todas semejantes, en un sol jardín.”

“El zorro se calló y miró un buen rato al principito. –Por favor domestícame- le dijo.”

”Ah, como voy a llorar.
–Tuya es la culpa- dijo el principito.
-¡Seguro!
-No has salido ganando mucho.
-Sí he ganado-dijo el zorro- he ganado a causa del color del trigo.”

“Adiós- le dijo el zorro-. He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: sólo con el corazón se puede ver bien, lo esencial es invisible a los ojos.”

Puedo seguir, pero mejor otro día no???

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